TOLEDO: LA RUTA DEL PUCHERO.

Escapadas.

Del 23 de febrero al 11 de marzo de 2012, se han celebrado en la provincia de Toledo las III Jornadas del Puchero. La idea consiste en que cada bar elabore un plato tradicional de puchero y te lo sirvan por un euro con cada consumición. Lo cuál supone una magnífica excusa para comprobar cómo es el nivel de las tabernas toledanas; y Cadacervezaconsutapa, como no podía ser de otra manera, estuvo allí, eligiendo como destino la capital de la provincia, la enigmática y monumental ciudad de Toledo.

Siempre es un placer visitar la que fue antigua capital del reino español durante la época de los Reyes Católicos, y más si cuentas con el añadido de que vas a llenar tu "selecto" estómago. Por ello, desde aquí recomendamos esta idea de la "Ruta del puchero" toledana, eso sí, poniendo algo de cuidado con el local al que se acude. Y para ello, en Cadacervezaconsutapa vamos a registrar cuál fue nuestra experiencia y qué lugares merecen ser recomendados.

Una de las vistas de la terraza de la Hacienda del Cardenal.

La ruta la iniciamos con buen pie, visitando un restaurante que se encuentra cerca de la entrada del casco histórico de Toledo. Dicho local forma parte de un hotel propiedad de la familia Botín, y se llama la Hacienda del Cardenal. Su ubicación forma parte de un edificio construido en el siglo XVIII por un cardenal conocido en su época. En el restaurante, puedes disfrutar de un cómodo salón interior, pero también de una amplia terraza rodeada por jardines y con unas vistas placenteras que se agradecen. Teniendo en cuenta que hacía buen día, ésta fue la opción elegida.

Las cañas ya medio consumidas con el rico puchero.

En este relajado lugar, es evidente que cenar es caro, con lo cuál no es apto para todos los bolsillos. Sin embargo, para nuestra sorpresa, la cerveza no es cara. Te sirven una caña larga en terraza por 1,50 euros. No nos pusieron aperitivo cierto, pero pedimos la primera ronda de pucheros: Puchero montañés en esta ocasión. Sin duda, delicioso, probablemente el mejor que probamos durante toda la jornada. Lo cuál dice mucho a su favor para quien quiera venir a cenar a la Hacienda del Cardenal (situado en el paseo de Recaredo número 24).


Avanzando por la zona monumental, y subiendo una de las habituales cuestas de Toledo, llegamos al bar Alquitara (calle Cristo de la luz, 29). Local de ambientación andaluza y flamenca, hará las delicias de todo amante de este milenario estilo musical, puesto que de fondo es lo que se escucha, y por dentro la decoración forma una especie de homenaje a ese mundo. Nada más pedir la ronda de cañas, uno percibe que es una taberna andaluza 100%, hasta sirven Cruzcampo. Y con perdón para los que amen esta cerveza, ya supone un déficit para cualquier bar. Aquí sí nos pusieron aperitivo: rodajitas de huevo duro con un poco de tomate frito. De puchero daban dos a elegir, y probamos ambos: Rancho canario y Menudo de Cádiz. No estaba mal pero no alcanzaban el nivel de la anterior visita. Y el precio de la caña (que era en vaso estándar de 20 cl.) fue 1,40, algo cara.

La ronda en la Alquitara. El Rancho canario es un guiso de garbanzos, fideos y algo de carne.

La siguiente parada la hicimos en una taberna que estaba rebosante de gente. Y pronto descubrimos los motivos. En La Abadía (Plaza San Nicolás), sirven varias cervezas de importación (Heineken, Paulaner, Affligem), en vaso de caña de tercio, y ponen unos aperitivos de aúpa con la consumición. En nuestro caso un rico plato de fideuá para compartir. Además, poseen gran variedad de tapas y raciones y a precios razonables, y el local es amplio y cuenta con distintos salones diferenciados (uno con cómodos sillones). Eso sí, el puchero era bastante simple: una sopa de espárragos cortijeros. Aún así, muy recomendable bar para cualquier visita a Toledo, aunque no se tomen muy en serio por lo visto las Jornadas del puchero. El precio de la pinta de Heineken, por cierto, es de 2,15 euros.

Imperiales, como la propia ciudad de Toledo, son las rondas en La Abadía.

Tras haber visitado lugares como la Hacienda del Cardenal o La Abadía, el listón de la ruta estaba bastante alto, pero aún así, el siguiente bar visitado consiguió mantener el tipo en la comparación: el Txoko. Taberna de estilo vasco, destaca por sus pinchos y por albergar en su interior, en la planta baja, un aljibe romano del siglo I, el cuál anuncian en la entrada del local. Además, cada día ofrecen un pincho especial diferente al precio de 2 euros, en esta ocasión: una bola de patata rellena de morcilla con una salsa de salmorejo y jamón. Estaba bastante bueno, aunque decidan ustedes mismos por las imágenes si es rentable o no por 2 euros (servido sin pan, ya que ellos mismos te indican que no es la costumbre comer un pincho así con pan). La cerveza que sirven es una alemana no muy conocida y de nombre impronunciable para un castellanoparlante, y cuyo sabor es un poco agrio. Lo mejor del bar es el aperitivo que te ponen con la consumición: un canapé por persona o de pan tumaca con jamón o de tortilla de patatas con ali oli. Riquísimos ambos. Y el precio de la caña es de 1,60 (bastante alto). Y el puchero que servían era Pardinas al curry con mejillones y gambones. Muy del norte.

Los pinchos.

Las cervezas y los aperitivos.

Para cerrar esta curiosa ruta visitamos un quinto bar. Pusimos rumbo a la famosa Plaza del Zocodover. Y se suele decir aquel refrán taurino de "no hay quinto malo", pero en este caso, por desgracia, sí que lo hubo. El Foro de Toledo, situado en dicha plaza, posee una de las terrazas más grandes y pijoteras de la zona. Y bien que se lo cobran: la jarrita de 25 cl. cuesta en terraza 3,75 euros, y la jarra grande de medio litro se va a los 5,20. Y esto sin contar el IVA que lo ponen aparte. Y todo ello sin aperitivo alguno, ni siquiera unas míseras patatas fritas de bolsa. Mientras, como puchero pusieron unas Lentejas a la antigua con su chorizo. Receta simple, aunque es justo decir que de buen sabor. Tras pagar y sufrir semejante sablazo, el dolor se hace mayor al descubrir, que en un bar situado en la esquina contraria donde se ubica El Foro de Toledo, tenían la oferta de botellines de Estrella Damm a un euro. Ver para creer.

Las pruebas del "atraco" sufrido.